La eyaculación precoz, problema común y tratable

La eyaculación precoz es una disfunción sexual masculina caracterizada por la incapacidad de controlar el momento de la eyaculación durante el acto sexual (respuesta eyaculatoria), lo que resulta en una eyaculación que ocurre con muy poco estímulo sexual y antes de lo deseado, dicha respuesta sexual suele interferir con la satisfacción sexual tanto para el individuo como para su pareja.
Este problema puede tener causas físicas, psicológicas o una combinación de ambas, y puede tratarse con diversas estrategias, que pueden incluir terapia sexual, específicamente acompañamiento sexológico por profesionales en psicología, con técnicas de control de la eyaculación y terapia psicológica especialistas en sexología. Por otra parte, los profesionales en medicina que acompañen los signos y síntomas físicos si se requiere con medicación, dependiendo de la causa subyacente y las necesidades individuales del paciente. Es importante hablar con un profesional, para obtener orientación y tratamiento adecuados.
El tiempo considerado como eyaculación precoz puede variar dependiendo de diferentes factores, incluyendo la percepción individual de satisfacción sexual y las expectativas de la pareja. Sin embargo, generalmente se define como eyaculación precoz cuando ocurre de manera consistente y repetida, con estimulación mínima, antes o poco después de la penetración, y causa angustia o problemas en la relación sexual.
En general, si la eyaculación ocurre regularmente dentro de uno o dos minutos después de la penetración, podría considerarse como eyaculación precoz. Sin embargo, es importante tener en cuenta que no existe un tiempo exacto universalmente aceptado, ya que puede variar de persona a persona. Si tienes preocupaciones acerca de la eyaculación precoz, siempre la decisión correcta será acudir a un profesional de la salud para obtener una evaluación y orientación adecuadas.
La eyaculación precoz puede ser causada por una combinación de factores físicos y psicológicos. Algunos de estos factores incluyen factores psicológicos relacionados con:
- Estrés
- Ansiedad
- Depresión
- Preocupación por el rendimiento sexual
Experiencias sexuales pasadas traumáticas también pueden contribuir. Igualmente, dentro de los Factores biológicos o condiciones médicas se encuentran los como trastornos hormonales, problemas de tiroides o desequilibrios químicos en el cerebro.
Otros se relacionan con los niveles de excitación sexual, algunos hombres pueden ser más sensibles a la estimulación sexual y tienen dificultades para controlar su nivel de excitación, lo que puede llevar a la eyaculación precoz. Asimismo, intervienen la experiencia sexual, la falta de experiencia sexual, así como la falta de conocimiento sobre cómo controlar la excitación sexual y retrasar la eyaculación, puede contribuir a la eyaculación precoz.
Por ende juegan un papel indispensable los hábitos de masturbación, la masturbación rápida y frecuente, especialmente con el objetivo de alcanzar el orgasmo rápidamente, puede condicionar al cuerpo a eyacular rápidamente durante la actividad sexual con una pareja. Asimismo, los problemas de relación o en pareja, es decir, los conflictos, así como la falta de comunicación y conexión emocional con la pareja, pueden contribuir a la eyaculación precoz.
Es importante recordar que la eyaculación precoz es un problema común y tratable, y buscar ayuda de un profesional de la salud puede ayudar a abordar los factores subyacentes y encontrar soluciones efectivas.